Soy un hombre muy reservado, empresario y a mis 40 años estaba soltero, casi sin tiempo para ampliar mis relaciones y realmente las aplicaciones no me resultaban lo suficientemente discretas y honestas conseguirlo, llegaban a frustrarme y acabar con mi motivación aparte de mi tiempo claro. Un amigo me habló de agencias de Matchmakers, profesionales que podrían ayudarme a encontrar a alguien especial, me decidí a visitarles, llegamos a un acuerdo, ya que en todo momento me sentí seguro y confiado con su metodología y profesionalidad. Mi experiencia fue maravillosa, conocía unas pocas mujeres serias y que sabían lo que querían sobre todo, citas que, aunque no llegaron a buen puerto, me animaron a seguir, fueron citas reales, honestas, de calidad.. sin duda. El día que conocí a Mili casi no podía frenar mis pensamientos de que ella era la chica con la que quería compartir mi vida y pasé de pensar «que me guste la chica que me guste la chica.. a.. Espero haberle gustado lo suficiente». Ella todavía no vivía en Madrid pero creo que conocernos ayudo a que toda nuestra vida, personal y profesional fuera a mejor y hoy disfrutamos de una vida en común compartiendo las pequeñas cosas de la vida y cada día más enamorados. No puedo estaros más agradecido P y O.